EZLN:30 años de Lucha

Por. Luis Román


“¿De qué tenemos
Qué pedir perdón?
¡De no habernos
Muerto de hambre!
Subcomandante Marcos
I
Han pasado tres décadas, cinco presidentes de la república. Los mismo del PRI – Ernesto Zedillo (1994 – 2000), Vicente Fox (2000 – 2006), Felipe Calderón (2006 – 2012), de nuevo el PRI con Enrique Peña (2012 – 2018) y uno de izquierda, AMLO (2018 – 2024).
Y el tema y problema de la situación de pobreza, marginación y explotación de los pueblos indígenas sigue sin resolverse.
Si en 1994, el discurso político del EZLN – Ejército Zapatista de Liberación Nacional – a través del subcomandante Marcos era la de “Construir un mundo donde quepan otros muchos mundos” (Comunicados EZLN, Ed. ERA, 1994, México, p.34).
Porque los indígenas habían quedado al margen del reparto agrario en esa zona del sureste del país. Debido al poder económico de los grandes terratenientes y las empresas transnacionales, la revolución y modernidad no habían logrado llegar a estos pueblos indígenas en el siglo XX.
En ese 1994 el surgimiento del EZLN como movimiento armado, llamó la atención y acaparó las cámaras y micrófonos de los medios nacionales e internacionales.
Lejos de ser un grupo armado, el EZLN era un movimiento político de protesta. Sus reclamos eran más que justos.
Su vocero, el Subcomandante Marcos, creó en ese momento, un nuevo discurso, que atrajo las miradas. Su prosa fina, su humorismo certero, su amplia imaginación, al crear a “Durito”, un escarabajo que lo acompañaba y hablaba, así como “Al Viejo” Antonio le dio el crédito de ser un excelente escritor.
Incluso en diversos países – España, USA, Argentina, Inglaterra, Alemania- se editaron sus comunicados, parábolas y fabulas. Fue y es un excelente narrador Marcos.
En ese enero de 1994, el Estado actuó con sensatez. La lucha era y sería desigual. Se pactó la paz, se firmaron acuerdos, que nunca se llevaron a cabo.
El paso del tiempo los fue olvidando. El EZLN no quiso ser un partido político, y pese a sus llamados para conformar un gran movimiento nacional, no pasó de la región de Chiapas.
II
¿ ué ha pasado en estos 30 años? El PRI perdió la hegemonía presidencial que tuvo por más de 70 años. El PAN y el sector empresarial inauguraron la transición a la democracia durante doce años. El PAN gobernó, pero no pudo desaparecer al PRI
De nuevo el PRI ganó la presidencia y en 2018, llegó al poder MORENA y su eterno líder AMLO.
La democracia en México se ha cubierto de un autoritarismo atroz. Nadie puede pensar distinto al huésped de Palacio Nacional, porque es conservador, corrupto, fifí.
La pluralidad es mal vista, en tanto el avance de MORENA en las entidades y congresos locales, asoman un nuevo partido de Estado. Similar al de los años 60s.
El narcotráfico ha crecido de manera insospechada. Ha pasado del norte del país – Sinaloa, Chihuahua y Durango –a Guerrero, Quintana Roo, y Chiapas. De la simple siembra de marihuana, se pasó a revender cocaína de Colombia, y hoy en estos Estados existen laboratorios donde se crea fentanilo.
El narco extorsiona, cobra derecho de piso, secuestra, se dedica a la trata de personas y recluta migrantes. Gana un caudal de dinero mal habido.
El EZLN sigue existiendo, el tiempo pasó y el olvido llegó. Marcos ha engordado, ha cumplido 66 años, muchos de los comandantes indígenas han muerto: Ramona y Galeano.
Hoy tienen que defenderse ya no de los finqueros ni de sus guardias blancas. Ahora deben cuidarse del Cártel Jalisco Nueva Generación. Es una guerra desigual. Pero la pobreza, miseria y desigual es la misma desde siempre en Chiapas.

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