(1º Parte)
“En el zapato del asesino
Encontraron un pedazo
De papel que decía:
“Recuerden que prometieron
Darle dos mil dólares
A mi mamacita” …
I
¿A quién se le ocurriría asesinar a un candidato presidencial rodeado de15 guardaespaldas al estar a bordo de un avión y recibir la orden de ejecutarlo en pleno vuelo? Lo más seguro es que el asesino también cayera abatido. No había ninguna forma de salir con vida en tan estúpida acción.
Pero sucedió en la vida real. Carlos Pizarro Leongómez (1951-1990), político y guerrillero cartagenero, máximo comandante del grupo Movimiento 19 de abril (M-19), entre 1986 y 1990 fue asesinado de esta manera, mientras hacía una campaña política para obtener la presidencia de Colombia.
Carlos Pizarr Adelantó estudios en Derecho en la Universidad Javeriana y en la Universidad Nacional, pero no los culminó.
Militó en las Juventudes Comunistas de Colombia (JUCO) y en 1972 se vinculó a las FARC-EP, al que estuvo adscrito durante un año. Con algunos de sus compañeros que también desertaron del grupo armado, fundaron el M-19 en 1974, bajo el ideal de una guerrilla urbana, intelectual, nacionalista y social democrática.
Pizarro se acogió al proceso de paz y desmovilización del M-19 durante la presidencia de Virgilio Barco, bajo el ideal de retomar la vida civil e instaurar un partido político que se llamó Alianza Democrática M-19 (ADM-19), y desde el cual se promovió la candidatura política de varios de los militantes del grupo guerrillero. Luego de la dejación de armas, Pizarro fue víctima de varios atentados y amenazas en su contra.
Siendo candidato presidencial para las elecciones de 1990, Pizarro fue asesinado por un sicario paramilitar mientras se disponía a viajar a Barranquilla. Su deceso fue declarado como un crimen de lesa humanidad por parte de la fiscalía general de la Nación en 2010.
Meses antes del crimen, en Medellín fueron reclutados por las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) Gerardo Gutiérrez Uribe y Andrés Gutiérrez Maya, dos jóvenes a quienes convencieron de asesinar a dos candidatos presidenciales con la promesa de que sus familiares recibirían grandes cantidades de dinero.
Andrés Gutiérrez Maya fue el responsable de terminar con la vida de Bernardo Jaramillo Ossa, mientras Gerardo Gutiérrez Uribe recibió la orden de ultimar al líder de la Alianza Democrática. Esa mañana, el joven ingresó al vuelo en el que también se movilizaba el candidato presidencial con una cédula falsa a nombre de Álvaro Rodríguez Meneses, ocupando el asiento 5C.
Luego de que el piloto indicara a los pasajeros que podían desabrochar sus cinturones, Gerardo Gutiérrez Uribe se levantó de su asiento y, tras afirmar a una azafata que tenía que entrar al baño, salió de este espacio con una ametralladora que descargó en una ráfaga de disparos en el cuello y cabeza del candidato.
Gerardo Gutiérrez Maya, por su parte, era la única persona que podía revelar detalles del crimen, pero fue asesinado por uno de los escoltas del DAS a pesar de que algunos testigos señalaron que el joven había soltado su arma en una clara intención de entregarse.
Años más tarde fue Carlos Castaño quien asumió la responsabilidad en el crimen, detallando que se había encargado de entrenar personalmente al joven; además, el líder de las AUC le habría afirmado a Gutiérrez Maya que dentro del avión iban a viajar más miembros de la organización para defenderlo y rescatarlo cuando el avión volviera a aterrizar.
II
Lo relatado es lo que ocurrió el 26 de abril de 1990. Este hecho impresionó al escritor Carlos Fuentes, quien, desde entonces, fue recopilando material hemerográfico y entrevistando a sus amigos colombianos. Con la idea de elaborar una novela biográfica de Carlos Pizarro, el líder del M – 19
Carlos Fuentes murió el 15 de mayo de 2012, ya no pudo mandar a la imprenta su novela. Sin embargo, su esposa y amigos, se encargaron de editar lo que sería su obra póstuma.
“Aquiles o el Guerrillero y el Asesino” fue publicada en 2016 por el Fondo de Cultura Económica y Alfaguara, bajo la supervisión de Silvia Lemus, la viuda de Fuentes.