Por. Manuel Zepeda
CDMX. Durante el pasado sábado se registró un lamentable suceso en el Parque Bicentenario, donde se desarrollaba la edición 2025 del festival Axe Ceremonia. Una estructura decorativa, que era movilizada por una grúa, colapsó y causó la muerte de dos fotógrafos, de 26 y 28 años respectivamente.
La Fiscalía de la Ciudad de México informó que de inmediato se brindó acompañamiento a los familiares de las víctimas a través de personal especializado en psicología, trabajo social y asesoría jurídica, mientras se inicia una investigación formal del incidente.
Según declaraciones de la Fiscal General de Justicia de la CDMX, Bertha Alcalde Luján, la investigación se centra en dos componentes fundamentales:
El fáctico: Se buscará esclarecer cómo estaba instalada la grúa y qué factores provocaron su caída.
El jurídico: Se determinará quién o quiénes fallaron en su responsabilidad de asegurar la correcta instalación y supervisión de las medidas de seguridad, tanto por parte de los operadores de la maquinaria como de los organizadores del evento y las autoridades encargadas de la supervisión.
En este sentido, se investiga a tres actores claves:
1. Operadores de la maquinaria: Se evaluará si las personas y empresas responsables de la movilización e instalación de la estructura actuaron de acuerdo con las medidas de seguridad requeridas.
2. Organizadores del evento: La investigación buscará determinar si se cumplieron las normativas de protección civil y se garantizó la seguridad en todas las instalaciones.
3. Autoridades de supervisión: Se revisará el accionar de las autoridades encargadas de la vigilancia antes, durante y después del evento.
Hasta el momento, se han llevado a cabo inspecciones físicas, evaluaciones periciales, revisiones documentales y entrevistas a testigos e involucrados. Las autoridades aseguran que se avanzará de forma rápida y exhaustiva para esclarecer lo sucedido y establecer responsabilidades, a fin de evitar que hechos de esta magnitud se repitan.
La Fiscalía reitera sus condolencias a los familiares y seres queridos de los fotógrafos fallecidos, y enfatiza la importancia de que eventos de esta naturaleza no queden impunes, protegiendo el derecho de los ciudadanos a disfrutar de eventos en condiciones óptimas de seguridad.