CDMX

Al hacer una reflexión sobre el tema de sustentabilidad hídrica y la situación de sequía y desabasto que experimenta actualmente la Ciudad de México, Clara Brugada sostuvo que “el tema del agua es prioridad, yo creo en un modelo del agua del bienestar, el agua como un derecho fundamental para todas y todos. Estamos muy conscientes del problema, lo conozco bien” .

Señala que es importante entender que la escasez de agua que enfrenta la Ciudad de México se debe a que tenemos una reducción en la disponibilidad del líquido causada por la falta de lluvia del año pasado y de los tres años anteriores. “Sí, estamos viviendo una sequía”, enfatizó.

También la voracidad inmobiliaria de políticos corruptos ha provocado que zonas que antes no carecían de agua, hoy sufran escasez, subraya Brugada; hoy las construcciones de edificios han cambiado la composición de las colonias: donde antes había una toma para una casa de una o dos familias, ahora son grandes edificios de 50, 100 o más departamentos; además, se dan licencias irregulares que hacen más grave la escasez en ciertas zonas de la ciudad”, expone.

Recordó que el cambio climático ha provocado periodos más severos y más grandes de sequías, de lluvias o fríos extremos, lo que afecta severamente a nuestro país, pues 65 por ciento de los municipios de México registran la presencia de sequía, y la Ciudad de México atraviesa la peor sequía desde hace 80 años.

“Eso es muy importante que lo tengamos en cuenta cuando veamos lo que está pasando con la escasez de agua”, expone. Agrega que la deforestación de nuestros bosques ha provocado que se ocupen zonas de reserva, disminución en la captación de agua y en la recarga del acuífero de la ciudad.

Brugada Molina expone que el agua no es un producto del mercado, sino un derecho, por lo que no se puede privatizar, pues eso generaría mayor desigualdad, mayor escasez y precios más altos, porque al privatizar se convierte en un negocio, y se debe garantizar que todas y todos tengan acceso igualitario a ella sin importar en qué parte de la ciudad vivan.

Para resolver la problemática del abasto de agua en el Valle de México, agrega, se requiere una visión integral basada en una coordinación con diferentes estados pero también cambiar el modelo de gestión del agua.

Enfatizó que en su momento expondrá su propuesta hídrica, pues se trata de una alternativa sólida técnica y financieramente, pero sobre todo con una visión humana y de derechos.

Enseguida, Clara Brugada expone las acciones que en años recientes ha emprendido el Gobierno de la Ciudad de México para mejorar el sistema y la distribución del agua potable en la capital del país: ha invertido más de 17 mil millones de pesos en cuatro años en la ciudad para captar más agua y mejorar su calidad; por ejemplo, se hicieron humedales en Cerro de la Estrella y Tlaltenco, se rehabilitó el sistema Lerma, y se echó a andar el programa de Cosecha de Agua de Lluvia.

Agrega que se instalaron más de 37 mil captaciones de agua de lluvia en hogares; asimismo, se echó a andar el programa de sectorización para tener bien controlado en donde hay fugas a lo largo y ancho de la ciudad y más de 300 kilómetros de sustitución de líneas primarias y secundarias, con lo que se evitan fugas y pérdida de agua. Asimismo, se atendieron más de 100 mil fugas en cinco años y se empezó ya a trabajar sobre este gran programa para obtener más agua.

“Así que este modelo de gestión empieza a cambiar. Con este nuevo enfoque se plantea invertir en un conjunto amplio de obras de infraestructura hidráulica”, destaca.

La morenista expone que actualmente el gobierno ya trabaja “para lograr obtener más de 6 millones de litros de agua por segundo para esta ciudad, en ese gran programa metropolitano se toman en cuenta nuevas fuentes de abastecimiento que implican obras para garantizarlo; por ejemplo la presa Madin o la potabilizadora de Zumpango, la laguna de Xico, manantiales, obras para el Sistema PAI Norte, la presa El Bosque Colorines, resolver lo de la planta de bombeo de Ixtlahuaca, resolver y mejorar el sistema Lerma, para obtener esa cantidad de litros que necesita la ciudad”.

Finalmente, Brugada Molina insiste en que “se necesita una coordinación muy importante entre el gobierno federal, el gobierno del Estado de México y el de la ciudad. Es un proyecto metropolitano que estoy segura de que podemos sacar adelante”.

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